7 feb 2012

Nevada

Viernes 5am.

Me despierto con ganas de ir al bano, tipico de mi, cada dos horas con este frio. Mi vejiga aun no esta acostumbrada al clima.

Me pesan los parpados pero no puedo aguantar mas, soy tan floja que prefiero quedarme 20 minutos apretando y dando vueltas en la cama calida sin poder dormir que salir del asunto, ir al bano y seguir durmiendo...

Sin embargo esta vez es diferente hay una motivacion: por la ventana los veo cayendo, ahi estan, tan blanquitos y chiquititos... Brinco de la cama sin pensarlo, me llevo peluches y sabanas por delante, piso el suelo frio olvidando que no tenia medias, me esconeto una unha y pego la nariz contra la ventana, parecia el comegentes cazando una victima pero no importa, nadie me espia, y entonces ahi estaba, tanto tiempo esperandola tanto tiempo deseando verla de nuevo abro bien los ojos y ... 

Nada, no habia un conho.

Viento soplando, menos no-sé-cuantos grados, una unha del pie sangrando del tropezon que me di con la cama al salir con prisa y una rabia nada normal. La mente me hizo una jugada sucia. O la mente o las laganas que daban la impresion de que algo caia alla afuera, no se cual de las dos. Ni siquiera hice pipi, de la rabia me acoste decepcionada sobandome el pie.

Muy graciosa imaginacion, ya vas a ver.


1 comentario:

Oswaldo Cintron H. dijo...

Al menos te hubieses orinado del conhaso en unha jejeje.